Andy, el dueño de Woody y compañía, ha crecido y ha llegado la hora de ir a la universidad. Antes de irse, debe dejar su cuarto ordenado y empaquetar su infancia para dar paso a su juventud. Accidentalmente, sus viejos juguetes acaban en el lugar equivocado y aparecen en una guardería plagada de niños pequeños y destructivos. En ella encontrarán también un nuevo grupo de juguetes donados que viven sometidos a las órdenes de Lotso, un oso abracitos con olor a fresas que amargado por que su dueña lo perdió y fue sustituido, dirige la guardería de forma dictatorial y vengativa.
Los juguetes se verán obligados a pasar una larga serie de peripecias intentando huir de la “situación-prisión” en la que Lotso y sus secuaces les obligan a vivir, con la esperanza de poder volver a casa con Andy.
El 22 de noviembre de 1995 se estrenó en EEUU Toy Story, la primera película totalmente animada por ordenador de la historia. Toy Story, como el ya legendario salto de Buzz Lightyear con el que pretende demostrar a Woody su capacidad para volar, catapultó con todos los honores a John Lasseter y su equipo de la factoría Pixar hasta la fama y más allá.
El primer Toy Story recibió cuatro nominaciones de la academia, al mejor guión original, a la mejor canción, banda sonora y, por supuesto un premio especial técnico. La Academia otorgó uno de sus particularísimos “reconocimientos especiales al mérito”, (Three Pixar execs get special Oscars), por unos efectos especiales especialmente meritorios por «desarrollar e inspirar la aplicación de técnicas que han hecho posible el primer largometraje animado por ordenador».
Fue nominada dos veces a los Globos de oro como mejor película-comedia visual y mejor canción original en una película “You've got a Friend in Me”. Y nominada a los premios BAFTA a los mejores efectos visuales. No contenta con eso, se llevó a casa ocho estatuillas de los premios Annie, como todos sabemos, el más alto honor que se pueda alcanzar en el cine de animación. Se le otorgaron como mejor película animada, director, animador, compositor, producción, diseño de producción, a los guionistas quienes fueron especialmente galardonados con el rubro de “mejor logro individual” y finalmente un premio a la producción en la categoría mejor logro individual técnico.
Tanto Los Angeles Film Critics Association Awards como el Kansas City Film Critics Circle, la hicieron acreedora a la estatuilla de «mejor película animada». Toy Story se encuentra entre los primeros diez lugares de «las 50 películas del British Film Institute que deberías ver a la edad de 14 años», posicionándose además como una de las «500 mejores películas de todos los tiempos», según la revista Empire.
Trailer original de la película
La película tuvo un presupuesto de 30.000.000 $ y un gasto en promoción y publicidad de 35.000.000 $ más, aunque el gasto en marketing total ha llegado a superar los 125 millones. En su primer fin de semana había recaudado $29,140,617 y en los cinco días siguientes alcanzó $39,071,176. Su recaudación total ascendió a $361,996,233, sin contar que a fecha de hoy sigue recaudando beneficios a través de DVD y una interminable lista de productos de merchandising.
Antes del estreno de la película, Steve Jobs, productor ejecutivo, manifestaba: «Si Toy Story es un éxito modesto —digamos que recaudara $75 millones en taquilla— nosotros [Pixar y Disney] quedaremos iguales [esto es, sin ganancias o pérdidas]. Si recaudara $100 millones, ambos haremos un buen negocio. Pero si realmente es un gran éxito de taquilla y recauda más o menos $200 millones, haremos una buena fortuna, y Disney obtendrá muchísimo dinero».
Cartel de la película para la versión en 3d del año 2009.
El primer Toy Story fue desarrollado por 110 empleados. Es interesante recordar que El Rey León, el año anterior, había tenido un presupuesto de 45 millones y 800 personas trabajando en el proyecto. En Toy Story, 27 humildes animadores dieron forma a 400 modelos virtuales que sirvieron de base para animar a los personajes.
Como protagonista, Woody fue el más elaborado con 723 controles de movimiento que incluían 212 sólo para las expresiones faciales con 58 controles adicionales para la boca. 800.000 horas máquina1 y 114.240 fotogramas animados que exigieron una media de dos a quince horas de promedio para su desarrollo ayudaron a completar el proyecto.
Quince años después, Pixar y Disney han querido cerrar el círculo haciendo del final de su trilogía un fenómeno a la altura de la película que les hizo saltar hasta el infinito y más allá, demostrando que donde Lasseter pone el ojo Woody pone la bala.
